Kidney Failure
¿Qué es la insuficiencia renal?
La insuficiencia renal ocurre cuando se producen daños en la pérdida de la función renal normal. También puede ser llamada la enfermedad renal en etapa terminal (ESRD). Existen 2 tipos de insuficiencia renal, aguda y crónica.
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La insuficiencia renal aguda se inicia bruscamente. En ocasiones se puede revertir.
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La insuficiencia renal crónica avanza lentamente durante al menos 3 meses. Puede generar insuficiencia renal permanente.
¿Cuáles son las causas de la insuficiencia renal?
Las afecciones que pueden generar a una insuficiencia renal aguda o crónica pueden incluir:
Insuficiencia renal aguda
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Rabdomiolisis, daño renal que puede suceder a partir de la degradación muscular debido a la deshidratación severa, infección u otras causas
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La disminución del flujo sanguíneo a los riñones a partir de la pérdida de sangre o shock
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Una obstrucción en el tracto urinario
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El síndrome urémico hemolítico, la obstrucción de los vasos pequeños en el riñón, a menudo, causada por una infección por E. Coli
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Infección o ciertos medicamentos que pueden ser tóxicos para los riñones
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La glomerulonefritis, una inflamación de las pequeñas unidades dentro del riñón, donde se limpia la sangre, pone en peligro la capacidad del riñón para filtrar la orina
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Cualquier afección que afecte el flujo de oxígeno y sangre a los riñones, tales como ataque al corazón
Insuficiencia renal crónica
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Nefropatía diabética, daño renal debido al alto nivel de azúcar en la sangre
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Presión sanguínea alta
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Lupus, una enfermedad del sistema inmunológico
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Obstrucción de las vías urinarias
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Síndrome de Alport, un trastorno genético
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El síndrome nefrótico, una afección que genera a un exceso de proteínas en la orina
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Enfermedad renal poliquística, un trastorno genético que causa quistes llenos de líquido en los riñones
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Cistinosis, un problema genético en el cual el aminoácido se acumula dentro de las células en los riñones
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Nefritis intersticial o pielonefritis, inflamación de las pequeñas estructuras en el riñón
¿Cuáles son los síntomas de la insuficiencia renal?
Los síntomas de la insuficiencia renal aguda y crónica pueden ser diferentes. Estos son los más comunes.
Agudos (los síntomas dependen de la causa subyacente)
Crónicos
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Poco apetito
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Vómitos
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Dolor en los huesos
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Dolor de cabeza
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Insomnio
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Picazón
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Piel seca
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Fatiga tras hacer actividad ligera
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Calambres musculares
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Elevada producción de orina o ausencia de producción de orina
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Incontinencia urinaria
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Palidez de la piel
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Mal aliento
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Problemas para oír.
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Irritabilidad
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Tono muscular débil.
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Cambio en el estado de alerta mental
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Sabor metálico en la boca
Los síntomas de la insuficiencia renal aguda y crónica pueden parecerse a los de otros problemas de salud. Siempre hable con su proveedor de atención médica para tener un diagnóstico. Posiblemente lo remita a un especialista en riñón, conocido como nefrólogo.
¿Cómo se diagnostica la insuficiencia renal?
Su proveedor de atención médica revisará su historia clínica y le hará un examen físico. Otras pruebas pueden incluir lo siguiente:
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Análisis de sangre. Los análisis de sangre para comprobar los recuentos de células sanguíneas, niveles de electrólitos y la función renal
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Análisis de orina.
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Ecografía renal. En esta prueba, se pasa un transductor sobre el riñón que envía ondas sonoras que rebotan contra el riñón. Las imágenes se envían a una pantalla de vídeo. El examen se usa para comprobar el tamaño y la forma del riñón y para encontrar una masa, cálculos renales, quistes u otra obstrucción o problemas.
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Biopsia de los riñones. Esta es la extracción de muestras de tejido (con una aguja o durante la cirugía) del cuerpo para su examen bajo el microscopio. Se hace para ver si existen células cancerosas o anormales.
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Tomografía computarizada (también llamada una exploración CT o CAT). Este es un diagnóstico por imágenes que combina el uso de radiografías y una computadora para producir imágenes detalladas del cuerpo, incluidos los riñones. Las tomografías computarizadas muestran más detalles que las radiografías comunes. Por lo general, no se puede realizar la TC con contraste cuando hay insuficiencia renal.
¿Cuál es el tratamiento para la insuficiencia renal aguda y crónica?
Su proveedor de atención médica determinará el mejor tratamiento según:
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Su edad.
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Su estado general de salud y su historia clínica
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Qué tan enfermo está
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Qué tan bien puede manejar medicamentos, procedimientos o tratamientos específicos
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Cuánto tiempo se espera que dure la afección
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Su opinión o preferencia
El tratamiento puede incluir hospitalización y:
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Líquidos intravenosos (IV)
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El tratamiento con diuréticos (medicamentos para aumentar la producción de orina)
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Supervisión estrecha de electrolitos como el potasio, el sodio y el calcio, y el ritmo cardíaco, ya que el músculo del corazón está en riesgo de cambios en estos electrolitos
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Medicamentos (para bajar la presión arterial)
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Necesidades de dieta específica
En algunos casos, puede tener problemas de electrolitos y niveles tóxicos de productos de desecho que normalmente eliminan los riñones. Usted también puede desarrollar la sobrecarga de líquidos. La diálisis puede ser necesaria en estos casos.
El tratamiento de la insuficiencia renal crónica depende del nivel de función renal que todavía tiene.
Diálisis
La diálisis se usa para tratar tanto la insuficiencia renal aguda como crónica. Se trata de la eliminación de sustancias de desecho y líquidos de la sangre que normalmente eliminan los riñones. La diálisis también se puede utilizar para las personas que han estado expuestas a o han ingerido sustancias tóxicas. En este caso, la diálisis se utiliza para prevenir la insuficiencia renal. Hay 2 tipos de diálisis: peritoneal y hemodiálisis.
Diálisis peritoneal
La diálisis peritoneal se realiza mediante la colocación quirúrgica de un tubo suave y hueco, llamada catéter, en la parte baja del abdomen cerca del ombligo. Una solución llamada dializado se hace pasar a través del tubo en la cavidad peritoneal. Este es el espacio en el abdomen que aloja los órganos. Está revestido por 2 capas de membrana llamada peritoneo. La solución se deja en el abdomen durante una cierta cantidad de tiempo. Allí, absorbe los productos de desecho y toxinas a través del peritoneo. El líquido se drena desde el abdomen, se mide y se desecha. Existen 3 tipos diferentes de diálisis peritoneal:
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La diálisis peritoneal continua ambulatoria (DPCA). Este tipo no necesita una máquina. Los intercambios, a menudo se conocen como pasadas, se puede hacer de 3 a 5 veces al día durante las horas de vigilia.
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La diálisis peritoneal cíclica continua (DPCC). Este tipo necesita una máquina de diálisis que puede utilizarse en el hogar. Este tipo de diálisis se realiza de forma automática, incluso mientras se está dormido.
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Diálisis peritoneal intermitente (DPI). La DPI utiliza el mismo tipo de máquina que la DPCC, pero los tratamientos toman más tiempo. La DPI se puede hacer en casa, pero, por lo general, se realiza en el hospital. Las posibles complicaciones de la diálisis peritoneal incluyen una infección o inflamación del peritoneo. Esto se llama peritonitis. Provoca fiebre y dolor de estómago.
Un dietista le ayudará a planificar sus comidas en base a las órdenes de su proveedor de atención médica. Por lo general:
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Es posible que tenga necesidades especiales de proteína, sal y líquidos.
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Es posible que tenga restricciones especiales de potasio.
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Puede que tenga que reducir la ingesta de calorías. El azúcar del dializado puede causar aumento de peso.
Hemodiálisis
La hemodiálisis se puede hacer en casa o en un centro de diálisis o en un hospital. Un sitio de acceso se hace quirúrgicamente, por lo general, en el brazo. Esto implica la unión de una arteria y una vena. Cuando se ha realizado el acceso, se le conectará a una máquina de hemodiálisis de gran tamaño que drena la sangre. La sangre se baña en una solución de dializado que elimina sustancias de desecho y líquidos. Luego, la sangre limpia se devuelve a su torrente sanguíneo. La hemodiálisis se realiza varias veces a la semana y tiene una duración de 4 a 5 horas. Durante el tratamiento puede leer, escribir, dormir, hablar o ver la televisión. En el hogar, la hemodiálisis se realiza con la ayuda de un compañero, a menudo un miembro de la familia o un amigo. Si usted elige hacer la hemodiálisis en el hogar, usted y su compañero recibirán capacitación al respecto. Las posibles complicaciones de la hemodiálisis incluyen calambres musculares y una caída repentina en la presión arterial. Esto puede causar que se sienta mareado o débil, o malestar estomacal.
Al seguir la dieta adecuada y tomar los medicamentos, según lo prescrito por su proveedor de atención médica, es posible que pueda evitar complicaciones. Un dietista trabajará con usted para planificar sus comidas, de acuerdo con las órdenes de su médico. Por lo general:
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Usted puede comer alimentos ricos en proteínas como carne roja y pollo (proteínas animales).
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Es posible que necesite limitar los alimentos que contienen potasio.
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Es posible que necesite limitar la cantidad de líquidos que ingiera.
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Es posible que tenga que evitar la sal.
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Es posible que necesite limitar los alimentos que contengan fósforo mineral (tales como leche, queso, nueces, granos secos y refrescos).
Otras opciones de tratamiento pueden incluir:
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Medicamentos (para ayudar con el crecimiento, evitar la pérdida de densidad ósea o para el tratamiento de la anemia)
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El tratamiento con diuréticos (medicamentos para aumentar la producción de orina)
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Cambios específicos en la dieta
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Trasplante de riñón
Las complicaciones de la insuficiencia renal
Debido a que los riñones tienen muchas funciones, las complicaciones de la insuficiencia renal pueden afectar a muchos sistemas del cuerpo. Las complicaciones pueden incluir:
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Anemia (conteo bajo de glóbulos rojos)
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Problemas con el corazón y los vasos sanguíneos.
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Enfermedad ósea
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Dolor en los huesos, articulaciones y músculos
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Disminución de la función mental, incluida confusión y demencia
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Lesiones en los nervios de las piernas y brazos
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Un mayor riesgo de contraer infecciones
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Mala nutrición
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Cambios en la piel, incluida sequedad y picazón
Vivir con insuficiencia renal
Las personas con insuficiencia renal viven más tiempo que antes. El tratamiento de diálisis no es una cura para la insuficiencia renal, pero le ayudará a sentirse mejor y vivir más tiempo. Con los años, la insuficiencia renal puede causar otros problemas como enfermedad de los huesos, presión arterial alta, daño a los nervios y anemia (tener muy pocos glóbulos rojos). Hable la forma de prevenir y tratar estos problemas con su proveedor de atención médica.
¿Cuándo debo llamar a mi proveedor de atención médica?
Si sus síntomas empeoran o si tiene síntomas nuevos, informe a su proveedor de atención médica.
Puntos clave sobre la insuficiencia renal
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La insuficiencia renal es una falla completa de los riñones para regular las funciones normales. Esto incluye el equilibrio de fluidos, la presión arterial, el equilibrio de ácido y base, los electrolitos, la producción de glóbulos rojos y la excreción de toxinas metabólicas y desechos.
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El pronóstico es desalentador para las personas con insuficiencia renal. A medida que se acumulan las toxinas y los líquido, la enfermedad puede ser potencialmente mortal.
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El tratamiento implica diálisis peritoneal y hemodiálisis para reemplazar la función de los riñones.
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El trasplante de riñón puede ser una opción para la supervivencia a largo plazo.
Próximos pasos
Consejos para ayudarle a aprovechar al máximo una visita a su proveedor de atención médica:
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Tenga en mente la razón de su visita y qué desea que suceda.
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Antes de su visita, escriba las preguntas que quiere hacerle.
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Lleve a alguien con usted para que le ayude a hacer las preguntas y para que recuerde lo que el proveedor le dice.
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En la visita, escriba el nombre de un diagnóstico nuevo y de todos los medicamentos, tratamientos o análisis nuevos. Además escriba todas las instrucciones nuevas que le dé su proveedor.
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Pregunte por qué se indica un medicamento o tratamiento nuevo, y cómo le ayudará. Además, consulte cuáles serán los efectos secundarios.
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Pregunte si su afección se puede tratar de otras maneras.
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Infórmese de por qué un análisis o procedimiento se recomienda y qué podrían significar los resultados.
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Consulte qué puede ocurrir si usted no toma el medicamento o no se hace el análisis o procedimiento.
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Si tiene una cita de control, anote la fecha, la hora y el propósito de esa visita.
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Averigüe cómo comunicarse con su proveedor si tiene preguntas.