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Seguridad con las armas de fuego

La importancia de la seguridad con las armas de fuego

Cerca de un tercio de los hogares estadounidenses tienen algún tipo de arma de fuego. El acceso a las armas de fuego en el hogar aumenta el riesgo de muerte y lesiones accidentales relacionadas con ellas entre los niños. Los disparos accidentales provocan la mayor parte de las muertes relacionadas con las armas de fuego en los niños menores de 14 años.

Subestimar la capacidad de un niño para acceder a un arma de fuego en el hogar y usarla es un problema frecuente. Incluso un niño de 3 años puede tener suficiente fuerza en los dedos para tirar el gatillo de un revólver. A diferencia de los adultos, los niños no pueden distinguir entre un arma real y una de juguete. Además, los niños no son capaces de tomar buenas decisiones sobre cómo manipular un arma de forma segura.

Para mantener a su hijo a salvo de las armas de fuego, piense si vale la pena el riesgo de tener este tipo de armas en el hogar. Si decide tener un arma de fuego, guárdela de manera segura en un lugar bajo llave, descargada y fuera del alcance de los niños. Guarde las municiones en un lugar separado del arma de fuego y bajo llave. Además, hable con su hijo sobre los peligros que representan las armas de fuego. Enséñele a su hijo a nunca tocar armas, ni jugar con ellas, y a decirle a un adulto si encuentra una.

¿Cuáles son las situaciones de alto riesgo con las armas de fuego?

Estar atento a las situaciones que pueden aumentar el riesgo de su hijo de sufrir una lesión accidental con un arma de fuego puede evitar este tipo de accidentes. Las situaciones de alto riesgo incluyen las siguientes:

  • Armas de fuego accesibles en el hogar. Los padres suelen subestimar la capacidad de un niño para acceder a un arma de fuego que esté en la casa o incluso su capacidad para presionar el gatillo.

  • Armas de fuego accesibles en otra casa. Incluso si en su casa no hay armas de fuego, un vecino, amigo o pariente puede tener este tipo de armas accesibles en el hogar.

  • Varones adolescentes. La mayoría de los niños que mueren en accidentes con armas de fuego son varones. La Academia Estadounidense de Pediatría (American Academy of Pediatrics) considera que, en los hogares donde hay varones adolescentes, hay un mayor riesgo de lesiones y muerte accidentales por armas de fuego.

  • Municiones y armas de fuego guardadas en el mismo lugar. Guardar un arma de fuego junto con las municiones o dejarla cargada aumenta significativamente el riesgo de lesiones y muerte accidental por armas de fuego. Entre un tercio y la mitad de todos los propietarios de armas de fuego guardan sus armas cargadas y listas para usarse, al menos durante cierto tiempo.

  • Falta de supervisión. La mayoría de los disparos accidentales entre niños suceden en momentos en los que no están siendo supervisados, como por ejemplo, a la tarde, los fines de semana y durante los meses de verano.

  • Hogares de alto riesgo. Según la Academia Estadounidense de Pediatría, los hogares donde hay un mayor riesgo de lesiones y muerte accidentales por armas de fuego son aquellos en donde una persona consume de manera excesiva alcohol o drogas ilegales.

¿Qué es la seguridad con las armas de fuego?

La única manera de proteger a su hijo de lesiones y muerte accidentales por armas de fuego en su casa es eliminar todas las armas del hogar. Sin embargo, existen otras maneras de mejorar su seguridad en torno a las armas de fuego. Entre ellas, se encuentran las siguientes:

  • Guarde el arma de fuego correctamente. Las armas de fuego siempre deben guardarse descargadas y sin amartillar en un armario bajo llave.

    • El arma debe guardarse separada de las municiones.

    • El arma de fuego y las municiones deben estar guardadas bajo llave en distintos lugares que solo conozcan los padres y que estén fuera del alcance de los niños.

    • En el caso de un revólver, coloque un candado para el cañón del arma. Esto evitará que el cilindro se cierre.

    • En el caso de una pistola, use un candado para gatillo. Nunca deje un arma sin supervisión, ni siquiera durante un segundo. Esto incluye el momento en el que la esté limpiando.

  • Eduque a su hijo. Enseñarle a su hijo los peligros de las armas puede ayudar a evitar lesiones y muerte accidentales por armas de fuego. Los padres deben enseñarles a sus hijos a hacer lo siguiente en caso de que vean un arma de fuego:

    • No tocar el arma de fuego.

    • Irse del lugar.

    • Avisarle a un adulto de inmediato.

  • Hable con familiares, amigos y vecinos. Incluso si en su casa no tiene armas, es posible que su hijo visite otra casa donde sí las haya. Siempre consulte a sus vecinos, amigos y familiares para asegurarse de que guardan las armas de fuego de forma segura fuera del alcance de los niños.

  • Use otros dispositivos de seguridad. Se deben usar dispositivos de seguridad, como candados para gatillo o para cañones, cajas de seguridad y cajas fuertes para armas para todas las armas de la casa. Estos dispositivos pueden prevenir la mayoría de los disparos accidentales mortales en niños menores de 5 años.

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